“Una casa es una estructura, un hogar es donde el WiFi se conecta automáticamente�: Yo


De los aspirantes priistas (aldeanos) a las candidaturas a diputados federales, ninguno puede decirse seguro o amarrado para ir a la contienda, nunca como hoy la incertidumbre reina entre ellos porque están viviendo en carne propia la primera experiencia del priismo local con su partido de regreso en la presidencia del país.
Nadie sabe si el CEN del PRI, Gobernación o directamente Los Pinos, mandará las candidaturas definidas con personajes que ni siquiera imaginan, que andan buscando el padrinazgo en el DF, centro del poder para estas cosas y a cuántos de los propuestos por el grupo priista local tomarán en cuenta.
Con mucho optimismo hablan de que para los 21 distritos el PRI veracruzano ya tiene candidatos definidos, y si, los tienen, pero esos son producto de la grilla doméstica, de los grupos de poder local o del trabajo político que cada uno ha venido realizando por su cuenta y riesgo, obviamente con el permiso de quien manda en la entidad, o sea del gobernador Javier Duarte de Ochoa.
Nadie sabe tampoco si el método que empleará la federación (es la que decide las candidaturas) es la encuesta y de ser así a quiénes estará encuestando.
Tampoco saben si los políticos que hoy son serios aspirantes y que han tenido problemas con la federación por mal uso de los recursos públicos, podrán saltar ese escollo y alcanzar la anhelada impunidad.
Y nadie sabe si con la recomendación del gobernador será suficiente para que les den la candidatura, o a qué personajes acercarse para lograr padrinazgos de suficientes kilates.
La que están viviendo los aspirantes priistas a las candidaturas es una situación inédita porque, como dicen, si bien es cierto que el PRI regresó a Los Pinos y con eso a las viejas prácticas que al tricolor le permitieron permanecer más de setenta años en el poder, las condiciones de aquellos tiempos ya no son las mismas, ahora si hay competencia real, los priistas ya no practican la misma lealtad y disciplina que antes a su partido, hoy emigran con mucha facilidad a otros institutos políticos donde si los toman en cuenta y en fin, los priistas de hoy ya no son los de siempre.
Por eso tanta incertidumbre y desconcierto; por eso nadie sabe bien a bien qué va a pasar en el futuro inmediato.

DE LA UTOP�A A LA REALIDAD

Nunca antes como hoy el discurso político contrasta con la realidad que vivimos.
Y es en todos los temas de la administración pública. Si se habla oficialmente de la inseguridad, el discurso ofende; si se aborda el de la educación, igual, no mejora ni lo hará aún con la reforma mientras no se ocupen de cambiar el modelo educativo y combatan a los cárteles del SNTE que controlan todo; si se habla de la obra pública, pues todos nos damos cuenta que no hay tal; si se les ocurre mencionar la situación económica ni se diga, la miseria que estamos padeciendo es resultado de la escasez de recursos del estado, y así todo lo que se dice es totalmente contrario a la realidad.
Pero qué es lo que más preocupa en estos tiempos: el desempleo, la espiral inflacionaria que provocan los gasolinazos; la falta de liquidez de las empresas porque el gobierno no les paga; la falta de vivienda para atender la necesidad de miles de paisanos que no tienen casa propia, no, nada de eso es tan importante como la inseguridad.
El secuestro que es el delito de más alto impacto es lo que se ha desbordado afectando miles de familias que lo padecen y que de momento ven como, sin explicación alguna, un miembro de la familia desaparece.
Y no importa si ocupamos el segundo lugar nacional o el séptimo en este delito, lo realmente importante es que este como las extorsiones, el cobro de derecho de piso, los asaltos a mano armada, el robo de vehículos, todos están aumentando cada día que pasa pese a los enormes esfuerzos que hace el gobierno por contenerlos.
No sabemos si es por el llamado efecto cucaracha porque en otras entidades como Michoacán el gobierno federal le entró fuerte y los delincuentes están emigrando hacia otros estados; si es porque muchos centroamericanos ya no viajan hasta los Estados Unidos como era su plan original y deciden quedarse en Veracruz, donde tienen que delinquir para sobrevivir; si son cárteles distintos a los que venían operando en la entidad los que han llegado a tratar de apoderarse de la plaza; si es el mismo desempleo que ha obligado a muchos jóvenes a rentarse como sicarios porque no encontraron otra forma de obtener ingresos, o qué; lo realmente cierto es que los ciudadanos estamos frente a un grave problema de inseguridad.
Y no es que la policía del estado no tenga voluntad para actuar o que la procuración de la justicia no funcione, no, lo que pasa es que son tantos los delincuentes y tantos los delitos que