Hay claroscuros en la vida de los partidos políticos del país. Como nunca antes los principales actores de las elecciones adelantan triunfos o derrotas de acuerdo a su condición interna actual, sin precedente.

En la víspera de las elecciones donde se renovarán tres gubernaturas y los 212 municipios de Veracruz, los partidos políticos muestran, a propios y extraños, una radiografía de su estado de salud.

El PRI celebra sus 88 años mostrando los achaques propios de su edad, con un líder que nunca lo ha sido, y que, para contrarrestar su fragilidad, se le puso una cuña que rebasará su figura, al colocarle a Enrique Ochoa Reza, presidente del CEN, a Claudia Ruiz Massieu como secretaria general del partido, lo que habla que, de nuevo, el tricolor estará en manos de una mujer.

El líder nacional del tricolor fue designado en medio de cuestionamientos sobre su falta de experiencia en labores partidistas, pero sobre todo por su falta de honestidad en el ejercicio de sus funciones públicas.

Así, desde la llegada de Enrique Ochoa Reza al PRI, su debilidad aumentó en lugar de fortalecerse ante el desgaste electoral que se convirtió de la noche a la mañana, en un fuerte revés en 2016. La fragilidad aumentó cuando mostró una inexplicable pasividad frente al caso Javier Duarte de Ochoa, exgobernador de Veracruz, a quien en lugar de llamarlo a cuentas y coadyuvar con la justicia para su merecido castigo, se limitó a retirarle sus derechos partidistas.

Ahora, el delincuente anda prófugo y con la responsabilidad de desprestigiar a su partido por la conducta delictiva que mostró cuando estaba al frente del gobierno de su entidad.

Ahora llega Claudia Ruiz Massieu, a hacer a un lado al inconsistente Enrique Ochoa y poner orden en la casa, con miras a las elecciones del 4 de junio. Es decir, dentro de menos de 90 días.

Por su parte, el PRD, es víctima de su propia decadencia al intentar sancionar a todos quienes muestran simpatía por Morena o su líder, Andrés Manuel López Obrador.

El legislador Miguel Barbosa fue removido de la coordinación de los senadores del PRD, con el objetivo de que no siga afectando la imagen y los intereses del partido, según la cúpula de su partido.

Así, con 15 votos a favor, 5 en contra y 2 abstenciones, el partido decidió suspender los derechos políticos del legislador y removerlo de su puesto.

Según Barbosa, detrás de la resolución está la mano del Jefe de Gobierno Miguel �ngel Mancera Espinosa y su equipo. Anteriormente se había declarado fuera del PRD el senador guerrerense Armado Ríos Piter, pero le precedieron Sofío Ramírez, Adán